Ayer, en un extenso acto asumió la presidenta Cristina Fernández de Kirchner la presidencia por otros cuatro años más. En esta próxima etapa, el gobierno deberá confrontar situaciones mucho más problemáticas que las que tuvo que tratar los pasados cuatro años. Al día de hoy con un contexto nacional e internacional muy distinto, aparecen en los horizontes cercanos problemas tales como la crisis internacional, el freno en el crecimiento, la perdida del valor de la soja y la inflación, entre otros.
La situación va a requerir de un gobierno que aplique políticas activas tanto en lo económico, como en lo político y lo social. El primer paso que debe tomar Cristina, a mi criterio, seria primero reconocer oficialmente la elevada inflación y luego tratarla como tema principal. Esto lleva a cuestas la regularización del INDEC, que además de imposibilitar una correcta planificación a largo plazo de las medidas a tomar por la poca fiabilidad de sus cifras, nos impide ingresar a los mercados prestamistas internacionales.
Las diferencias con el anterior periodo de gobierno se hicieron notar mucho antes de que comience oficialmente en el día de ayer, el nuevo mandato. Esto se hizo evidente con decisiones como la de restringir la compra de dolares, que como con todo, termina afectando a la clase media que era la unica que tenia una plena restricción en el tema porque las empresas y los grandes empresarios que hacen los movimientos importantes de divisas al exterior pudieron seguir operando normalmente. Medidas como estas son a las que el pueblo argentino está sensible. Estas le recuerdan a las crisis y a los corralitos, e inician siempre corridas cambiarias y pánico entre los ciudadanos. La otra medida que evidencio el quiebre entre lo nuevo y lo viejo, fue el recorte drástico de los subsidios. Esto fue el inicio de la etapa de ajuste a la que va a tener que hacer frente al gobierno de ahora en más. No se si va a ser tan dramático como lo pinto Nelson Castro con su "Se acabó la Fiesta", pero estoy seguro, por como se viene el contexto nacional e internacional, que una etapa de ajustes y redireccionamientos es inminente.
Saludos y felices fiestas!
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