En la semana el vicepresidente, Amado Boudou, dejo
entrever que en la interna del oficialismo se piensa y se pensó seriamente en
una reforma de la constitución, con el único objetivo de perpetuar aún más la
hegemonía del modelo psudo-progresista K.
La información fue filtrada por varios funcionarios, que
apuntaron directamente al vice. Las filtraciones indicarían que Boudou habría
comentado que “No hay que esperar 3 años para hablar de la reforma constitucional”,
en un almuerzo.