Muchos se preguntaran que tuvo que ver estos últimos años Don Julio con Avellaneda. Estuvo más vinculado de lo que parece. Sobre todo en Independiente, que supo manejar a su ahijado Comparada, a la barra brava y al sindicato de camioneros encabezado por Pablo Moyano, secretario general del gremio. No tanto así en Racing, que desde que Rodolfo Molina terminó con los siete años de gerenciamiento fraudulento, el club se reestructuro en muchos aspectos y estuvo bastante más distante de la AFA.
El 17 de diciembre Gastón Cogorno, de la agrupación "Racing Sigue", ganó casi con el 70% de los votos, renovando así la gestión pasada hasta 2014, esta vez, con Molina como vicepresidente. Con tan sólo 39 años, el nuevo presidente de la Academia será el encargado de seguir el proyecto oficialista e intentar salir campeón, hecho que no ocurre desde el Apertura 2001. En tanto, un día después, la fuerza militante "Independiente Místico" venció con el 60% de los votos al partido oficialista, que tenía a Cacho Álvarez, intendente de Avellaneda, a la cabeza. Para Javier Cantero, ahora presidente del rojo, sólo le alcanzó con presentarse medio año antes de los comicios para vencer a una fuerza que dejó al club endeudado en más de 200 millones de pesos y con el estadio sin terminar.La rivalidad y el folklore entre estos equipos va a seguir vigente, pero el pasado diciembre a los hinchas los unió la participación en sus clubes, y aunque todavía no esté nada dicho con estos nuevos dirigentes, este hecho es una esperanza alentadora para todos los que esperamos un cambio en el fútbol criollo. Por eso, más que decir "Independiente de los socios", como el slogan de Javier Cantero, es factible decir "Avellaneda de los socios"
No hay comentarios:
Publicar un comentario